martes, 29 de mayo de 2007

Los rezos


Aletear de murciélagos...
Paredes de cueva como testigos mudos del intento de vuelo
Cavidad roja y profunda
húmeda, de piedra
Los rastros de dolor ya han sido limpiados
En un mandala oscuro la sangre -manando- se ha convertido en oro
Una célula potencialmente creativa nace justo en el centro
Rezos nocturnos se alzan en la atmósfera
La puerta se entreabre...




© 2007 by Orquídea

3 comentarios:

Unknown dijo...

Me gusta el ambiente.... pero aquí debería empezar la historia... ¿tendrá continuación? Un beso, Orquídea,
V.

Anónimo dijo...

se entreabre y deja al descubierto las miserias iluminadas del alma

Alejandra Dening dijo...

y los murciélagos se liberan.