lunes, 21 de mayo de 2007

Sanguijuela


Como sanguijuela
me aferro a las cosas
porque no tolero
vivir desprendida.
Si no me adhiero
a algo o a alguien
no sé cómo vivir.
No sé vivir suelta.
Grito y clamo por salir
de esta succión compulsiva.

Añoro ser libre
y dibujar descalza
siluetas de plumas blancas
que me crezcan en la espalda.
Reírme a carcajadas
y marcar
con alegría
la claridad mi contorno
desde la danza aireada
de la no dependencia.

¿Cómo dejar de ser sanguijuela
para generar mi propia sangre
roja
intensa
soberana
pulsante
que irrigue
la promesa de mis próximas alas...?
© 2007 by Orquídea

2 comentarios:

quantum dijo...

Nunca la sanguijuela tuvo tanta poesía. Vivir aferrada y ser libre: la contradición de las almas intensas. Tú eres tu respuesta: las alas son estas palabras tuyas.
Te felicito.

FABIANA dijo...

que bueno eso!!! yo solia ser sanguijuela...hasta que me di cuenta que lo que se lograba era lo contrario...ahora intento el despliegue de mis alas...del vuelo compratido pero no fagocitada....te venero reina
yo